«En situaciones de emergencia, no hay solución cuando los Gobiernos actúan por separado y las opiniones públicas reaccionan por separado ante una misma amenaza cuya inmensidad y cercanía no es posible ignorar» – Jean Monnet
El pasado miércoles tuve la oportunidad de saludar a Antonio Turiel, a quien no conocía personalmente, pues me presenté como colega bloguero en el marco de unas conferencias sobre Energía y Cambio Climático que se pronunciaron en la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad de Barcelona.
El lector asiduo recordará la entrada que dediqué a Mariano Marzo, que titulé Por fin alguien dice las cosas como son (o casi). En esta ocasión el calificativo atenuador casi desaparece por completo. Tanto su intervención sobre energía como la del biólogo Salvador Pueyo sobre cambio climático mantuvieron a gran parte del público, formado mayoritariamente por estudiantes, clavado en sus respectivas butacas del Aula Magna durante bastantes horas. Pero fue la de Turiel la que más aturdió a los presentes, debido sin duda a la mayor inmediatez de los problemas energéticos que se nos avecinan, con respecto a los climáticos.
Esta afirmación (mía) es notablemente occidental-céntrica (o rico-céntrica), pues sabemos que son millones ya los afectados y desplazados por los problemas climáticos que nosotros provocamos. Ocurre que muchos de ellos ya no tienen energía, pues debemos recordar que hay mil quinientos millones de personas en el mundo sin acceso a la electricidad. Además, nosotros disponemos, por ahora, de mayor capacidad de protección frente a los fenómenos meteorológicos extremos, precisamente en función de nuestro elevado consumo de energía. No porque seamos más listos, pues estamos a punto de darnos de bruces contra nuestra grave miopía existencial.
El discurso de Antonio Turiel enlaza el problema del pico del petróleo con la economía denominada ecológica. Siempre he pensado que esta nueva economía, de componente biofísico, peca de tener un adjetivo al que la presión mediática ha conseguido atribuir connotaciones negativas, especialmente entre las élites – que son quienes deberían atenderla. Este hecho, en mi opinión, limita considerablemente la atención que el poder presta a sus postulados.
Siguen unos primeros apuntes necesarios para contextualizar el mensaje de Turiel.
La economía científica
Resumiendo mucho, muchísimo, podría decirse que la ecological economics es la economía situada en el entorno físico en el que opera, y que su aportación teórica fundamental es la de tomar en consideración las leyes de la física, y muy en particular las de la termodinámica, cosa que la versión ortodoxa ignora por completo. A mí, que soy ingeniero, este enfoque me suena como mucho más natural, más en la realidad de las cosas como son, y de una lógica mucho más aplastante, que el aplastamiento que ha hecho de todos nosotros la economía neoclásica cuya toxicidad invade nuestros cuerpos, vacía nuestros bolsillos, y modela nuestros espíritus con su oculta ideología. Es mi intención divulgar sus principios en este blog a no mucho tardar, no sin antes evidenciar la levedad y falsedad de las hipótesis de partida de la economía neoclásica que muchos tienen todavía por ciencia.
Es muy importante darse cuenta de que, por lo menos en estos términos, la economía ecológica, por mucho que se la quiera ubicar interesadamente en la izquierda, no es en absoluto ideológica. Son faves contades. Lo inaudito es que hayamos llegado hasta aquí creyendo que las habas contadas son las de la economías clásicas. Ya un tal Podolinski escribía a Marx señalándole las limitaciones que imponen las leyes de la termodinámica sobre la economía pero éste, cegado por los incipientes progresos de la época en productividad agrícola (basada en los combustibles fósiles), no le hizo el menor caso. Ni tan sólo a indicación de Engels, a quien Podolinski recurrió epistolarmente como último recurso.
La ideología aparecería a partir del momento en que se opte por las distintas alternativas resultantes de esta formulación, en el caso de que hubiera margen para ello.

Turiel mostró, de fuentes de la AIE, una imagen parecida a esta, de Hirsch 2008, que fue expuesta por Salvador Pueyo - Correlación no indica causalidad, pero hay causalidad
A la vista de los principios de la economía ecológica resulta ser evidente que PIB y caudal de energía neta disponible (para realizar trabajo) están estrechamente relacionados, no pudiendo existir el primero sin el segundo. De modo que la disminución del caudal de energía al que nos enfrentamos supone, inequívocamente, la imposibilidad física de que el mantra retórico de ‘volver a la senda del crecimiento’ tenga algún sentido real (a igualdad de productividad). Esta situación fue también expuesta por Salvador Pueyo.
El mensaje de Turiel es contundente. Los combustibles fósiles, en particular el petróleo, ha alcanzado ya su pico de producción físicamente insuperable. El del carbón y el gas natural está muy próximo, y la moda reciente del gas de esquiso es un bluf en muchos sentidos. Dada la relativamente fácil posibilidad de sustituir un tipo de energía fósil por otra (aunque requiere tiempo), los picos de la energía neta disponible procedente de los tres fósiles tienden a converger. Pues bien. Este pico está aquí mismo. O bien ya estamos en él, o bien, como mucho, lo habremos alcanzado en 2015. Bueno, tal vez antes, porque mencionó un informe encargado por la primera aseguradora mundial, la Lloyd’s, al Royal Institute of International Affairs, conocido por Chatham House que, ya en sus primeras páginas, señala la posibilidad de un supply crunch (contracción brusca de oferta) nada menos que para 2013.
Las energías renovables no sólo no alcanzan, ni mucho menos, a cubrir la demanda actual, sino que además su existencia depende de los combustibles fósiles, especialmente del petróleo. Mencionó un estudio reciente de la Universidad de Valladolid, que limita la energía mundial disponible por vía eólica a 1 TW. La energía fotovoltaica tiene limitaciones fundamentales que hacen que para su fabricación y operación, que se realiza mediante energía de origen fósil, sea necesaria cerca de la mitad de la energía neta que la que la placa va a generar en toda su vida útil.
El pico del uranio se estima en 2015 en el caso peor. Turiel señaló que, en la actualidad, alrededor de 1/6 de la disponibilidad mundial de uranio procede del desmantelamiento de los misiles nucleares de la antigua Unión Soviética, pero que los rusos ya van advirtiendo que lo que les queda lo quieren para sí. Los biocombustibles son otro bluf mediático. Compiten con la alimentación, y además son también dependientes del petróleo.
Turiel señaló que, dada la dificultad creciente de extraer el antaño oro negro, la rentabilidad de la inversión está ahora en un 5-10% por pozo. De cada tres pozos que se intentan explotar sólo acaba funcionando uno. Conoco-Philips ha abandonado ya la búsqueda de más petróleo. Shell podría seguirle a corto plazo. A todo esto me resultó definitivo darme cuenta de que la teoría del pico de Hubbert incluye, de hecho, también las reservas todavía no descubiertas.
De modo que cuando usted oiga lo de volver a la senda del crecimiento, viniendo de un responsable, sepa que está frente a un ignorante o que le está tomando el pelo por algún motivo que deberemos averiguar para poder responsabilizarle.
Turiel sabe que la tecnología no va a arreglar las cosas, entre otras razones porque, cuanto más sofisticada es, más energía requiere para ser implementada. En este sentido, detalló con pleno conocimiento de causa el estado actual de la energía de fusión: como mucho, el primer reactor estaría disponible alrededor de 2070. Y en todo caso hay limitaciones fundamentales que impedirían disponer del número de reactores deseado a voluntad. Estima que la investigación en este campo va a ser abandonada.
Tenía pendiente desde hace tiempo una entrada titulada “La verdad de las energías renovables”, que iba retrasando para cuando entrara en el asunto económico. La consideraba muy políticamente incorrecta, pues no sólo contradice las opiniones oficiales sino también las de los movimientos alternativos organizados. Por eso agradezco a la contundencia veraz de Turiel que me abra un camino donde él se está erigiendo en maestro por méritos propios.
¿Por qué aquí?
En el debate, muy extenso y enriquecedor, surgió, como acostumbra en estos casos, la cuestión de los motivos por los cuales los medios de comunicación no están hablando de la alarma extrema a la que esta situación nos expone. También algo más específico del contexto: ¿por qué este debate está teniendo lugar en una facultad de ciencias biológicas? ¿Por qué no se produce en una facultad de (ciencias) económicas? ¿O en el parlamento?
¿Por qué un acto como este ha tenido que celebrarse a (loable) iniciativa de la Coordinadora para la Salvaguarda del Montseny?
Siempre que tengo ocasión me refiero en mis conferencias a la comunidad científica, a toda ella y no solo los especialistas, como sujeto de responsabilidad histórica en su función de suplir las carencias del sistema comunicativo de mercado. Incido en la obligación ética que les asiste de dar a conocer estas cuestiones para que sean debatidas en público. Mariano Marzo, y especialmente Turiel, son ejemplos paradigmáticos de respuesta a esta pulsión ética necesaria.
En definitiva, este panorama, si fuera asumido por la población y por la clase política, debería inducir a que el desmantelamiento de la sociedad derrochadora de energía se hiciera de una forma programada, planificada, minimizando los daños. La alternativa es el caos, lo que él denominó colapso catabólico: acabar vendiendo las propiedades comunes (las del Estado) para poder pagar las deudas, perderlo todo sin nada a cambio. Turiel se refirió a esta posible irracionalidad colectiva en un breve comentario. Tal vez porque, como yo, no vemos en el horizonte nada concreto que nos permita atisbar esperanza.
Por ahora, porque estoy convencido de que existe una intuición social en este sentido. Mi madre, ahora una anciana severamente enferma de Alzheimer que siempre había mostrado lucidez, me repetía, cuando todavía le quedaba alguna: “Ferran, esto ha llegado demasiado lejos. No puede funcionar. Se derrumbará”.
¿Qué hacer? Turiel lo tiene claro: como primera medida, organizarse individual y grupalmente para la autosuficiencia.
Nota final
Turiel ha elaborado una entrada en su blog The Oil Crash relativa al acto al que aludo, que puede ver aquí.
Hola Ferran, soy un lector asíduo de tus publicaciones, y ésta, con la terrible perspectiva que ofrece, no escapa a mi apreciación. En Nicaragua, donde vivo, vemos a cada rato los efectos del cambio climático en el desplazamiento de personas por inundaciones y otros riesgos (soy fundador del sistema de gestión de riesgos en este país y consultor regular de las Naciones Unidas y este tema y en temas de cambio climático también). Como economista crítico, me gusta la vulgarisation que hiciste de las falacias de la economía neoclásica. Felicitaciones. Siga alimentándonos con estos ensayos críticos.
Patrick Dumazert.
pd. para tu mamá te recomiendo darle un tratamiento natural basado en vinpocetina (un derivado de la Vinca minor), fosfatidilserina (de soya), Huperzia serrata y Ginko biloba. Se encuentran juntos en un solo producto combinados con factores de transferencia, que se llama TF Recall de la compañia 4 Life. Entiendo que se encuentran en España. Tiene excelentes resultados.
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Muchas gracias, amigo, de su parte. Lo probaré.
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Me alegra sobremanera que también en el ámbito científico empiece a darse un despertar militante en reivindicación de la mas elemental sensatez.
Visito regularmente el blog de Turiel y me parece que está haciendo una labor impagable.
No podemos pedir conciencia sobre un problema sobre el que la gente no tiene información. Vale que el periodismo actual es cualquier cosa menos periodismo de investigación, pero al menos deberían aceptar publicar artículos como los que escribe Turiel o los que se desarrollan en este blog.
Creo, por otra parte, que oil crash, cambio climático y crisis de biodiversidad deberían afrontarse como un todo.
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Si, estoy de acuerdo. Forman un todo. También la crisis alimentaria, a mi entender.
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Ferrán lo del TW máximo eólico es un bluf de mucho cuidado!
S2.
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Ojalá tengas razón. ¿Conoces este debate, a mi parecer bien informado?
http://www.theoildrum.com/node/8322
Da la impresión de que la tesis se sostiene muy bien… ¿Cuál es tu opinión?
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Ferrán, para empezar aisla la capa de los primeros 200m y da a entender que no hay transferencia de energía entre capas algo que es totalmente absurdo porque la energía se transfiere siempre desde donde hay más energía hacia donde hay menos. Dan a entender que si utilizamos nuestro límite teórico Alemania y Francia se quedarían con mucho menos viento! Sin hablar que en realidad hay países que ya han llegado a ese límite http://en.wikipedia.org/wiki/Wind_power_in_Germany, y eso que aún queda muchísimos sitios de donde extraer la energía, principalmente de la off-shore. ¿Acaso los molinos que se pongan en el mar van a quitar el viento a los de Albacete? ¿Entonces, qué sentido tiene el parámetro f1? ¿si obtenemos toda la energía de los 200m en un punto dado el viento se parará? No tiene ningún sentido, el Sol seguirá calentando y proporcionando la energía suficiente para mover los vientos en todo el planeta y seguirá habiendo transferencia de energía de las capas altas a las bajas. sólo ha de tenerse en cuenta a la hora de calcular la distancia entre molinos, es decir la densidad de un parque eólico a nivel local.
Cualquier estudio eólico ya tiene en cuenta varios de esos parámetros y además no entiendo que utilicen la medida del w para referirse a energía, sólo por ese «error» no se debería haber publicado el artículo, artículo que en realidad, viene a intentar apoyar las tesis que se exponían en crisisenergética.org en la primera mitad de la década pasada. Vamos que el resultado de ese estudio estaba escrito de antemano y los parámetros se han escogido para apoyarlos.
La eólica aún dará mucho que hablar. Afortunadamente en este país se están haciendo las cosas medianamente bien en ese sentido, por mucho que políticos y lobbies correspondientes intenten poner puertas al campo. Al final a la fuerza ahogan y la necesidad y la termodinámica harán su trabajo, es imposible ir contra ellas.
Saludos.
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Ok. Creo entender. Muchas gracias Víctor.
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Víctor, es un error creer que las altas capas de la atmósfera transfieren energía en grandes cantidades a las inferiores. En realidad, el calentamiento diferencial del aire (que, como es transparente, deja pasar la luz, que calienta la tierra, que calienta el aire justo encima) hace que se produzca convección y esto «pone en marcha» los vientos. Fuera de las zonas de convección y las complementarias de subsidencia la estructura del flujo es bastante estratificada (organizada en capas horizontales) debido a la rápida rotación de la Tierra.
Lo que dicen De Castro et al. es que en la franja inferior de la atmósfera se disipan en media unos 100 Tw (por cierto que hablar de potencias medias no es ningún error conceptual, yo lo hago frecuentemente cuando digo, por ejemplo, que España consume una cantidad de energía equivalente a una potencia media de unos 200 Gw; eso te evita estar todo el rato diciendo el período de tiempo de referencia, e.g., 6 Ej al año. Creer que si aumentamos la cantidad de aerogeneradores la atmósfera superior transferirá más energía es un error conceptual; si aumentamos mucho la cantidad de aerogeneradores o aumentamos el drag efectivo (empaquetamiento denso) o deflectamos el fluido; en ambos casos la disipación sigue siendo 100 Tw pero encima deja de pasar por nuestros molinos. Así pues, sí, poner muchos molinos puede perfectamente modificar los patrones de viento locales y regionales (yo estoy en un proyecto europeo que estudia, precisamente, ese efecto).
Salu2.
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Bueno, ahora ya sin ningún tipo de dudas…aunque los creyentes seguiran en lo suyo……
http://berkeleyearth.org/Resources/Berkeley_Earth_Summary_20_Oct
Es el resumen de las conclusiones a las que han llegado los escépticos climáticos capitaneados por Richard Muller….Llegan a las mismas conclusiones que aquellos a los que tachaban de aprovechados del sistema, mentirosos, …etc. En su descargo: la honestidad científica con la cual han procedido….A pesar de que los resultados no confirmaban sus hipótesis los han publicado. Un 10 para el proceder científico (siempre alejado de las creencias…..).
Lo dicho por muchos, urge tomar medidas desde ya…sin dilación. Se debe decrecer de modo ordenado (ver http://www.crisisenergetica.org/article.php?story=20111018210244440 ), y para ello deben analizarse los problemas, acotarlos y buscar soluciones (teniendo en cuenta, como muy bien has comentado en otros posts, que estamos tratando sistemas complejos en los que las soluciones reduccionistas no van a funcionar y las soluciones holísticas lo más seguro es que sirvan tan sólo para amortiguar lo que ha de venir).
Salu2
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Hola Ferran,
Estoy preparando una entrada al respecto (tal vez la publique mañana). Soy escéptico. Creo que esta es la nueva estrategia del negacionismo.
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Por cierto, lo que aparece en la foto no son aerogeneradores indios, sino una turbina AK1000 para una central mareomotriz en Eday, Orkney (al norte de Escocia).
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He consultado la fuente, que induce a la confusión en la que he caído: http://spectrum.ieee.org/energy/renewables/tide-turns-for-turbines
Ya lo he coregido. Gracias.
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