[Actualización 14/04: Ver corrección y complemento aquí.]
Nunca hubiera querido publicar este post. Nunca había pensado que, de tener que hacerlo, iría a ocurrir tan temprano. Lo que está ocurriendo es realmente extraordinario.
Antes que nada, una cierta «buena» noticia. En los dos últimos años las emisiones no han aumentado. Algunos creen que las emisiones han llegado al máximo, que estamos superando el “pico de emisiones”. Es posible que estemos entrando en terreno desconocido: ni un solo economista había previsto esta situación en los escenarios de futuro que el IPCC les solicitó en su día. Tranquilos por ahí, las emisiones, o sea el crecimiento económico, no cesarían de aumentar… decían. O decían que una cosa no tiene que ver con la otra.
Ahora las malas noticias. La concentración de CO2 en la atmósfera ha experimentado el mayor aumento nunca registrado: de +3,76 ppm, de febrero 2016 a febrero 2015. En este punto hay que ir con cuidado de no confundir flujos con acumulaciones, y creer que una reducción de las emisiones equivale a menor forzamiento climático. No es así. Lo que fuerza el clima es la concentración, no las emisiones. Y es lógico que la concentración atmosférica de CO2 siga aumentando al nivel de emisiones actual. Por mucho que disminuyan las emisiones la concentración seguirá aumentando, salvo que fueran tan ínfimas que la biosfera y los océanos pudieran absorberlas todas ellas.
Pero ¿por qué ha aumentado tanto la concentración? ¿Cómo es posible que ambas cosas – detención del crecimiento de emisiones, y récord en aumento de la concentración – sean ciertas simultáneamente? Pues el problema real es que, con emisiones constantes, o incluso disminuyendo en 2015, la concentración haya aumentado como nunca. Esto nos sugiere la presencia de alguna otra fuente de GHG vertiendo a la atmósfera, además de nosotros. ¿Cuál puede ser?
¡La propia Tierra! Si amigos, la realimentación positiva es esto. Ya no podemos evitar que la Tierra emita, y que esas emisiones propias sean ahora ya superiores a su propia capacidad de absorción por parte de la biosfera. Lo normal, lo que estabilizaba el clima, era esta autorregulación que se ha perdido, al parecer.
¿Tiene dudas? Pues esta semana ha sido publicado en Nature, y firmado por 23 autores, todos ellos los mejores especialistas mundiales en el ciclo del carbono, un paper con el título: “The terrestrial biosphere as a net source of greenhouse gases to the atmosphere”. De confirmarse esta tendencia, todo apunta a que habríamos perdido ya el control de la situación – si es que alguna vez lo tuvimos. Runaway climate change, le llaman.
Además el hielo del Ártico ha alcanzado su mínimo invernal desde que se mide. Claro, se han registrado temperaturas hasta 16ºC superiores a lo habitual. El nivel del mar está aumentando por encima de lo previsto en los peores escenarios. Son ya +3,2 mm/año en lo que va de década, y aumentando. En la década anterior fueron +2 mm/año.
Espeluznante dato de temperatura de febrero
Todos estos datos palidecen frente al dato de temperatura de febrero que ayer publicó la NASA. La temperatura media de la Tierra del mes de febrero fue superior en+1,35ºC a su referencia, que es parte de la segunda mitad del siglo XX. De febrero a enero ha habido un salto de nada menos que +0,21 ºC. Por cierto que de octubre de 2015 a septiembre de 2015 ya hubo un salto de 0,24 ºC, pero todos esperábamos que fuera pasajero, un outlier. Por el contrario, ha ocurrido otra vez. O sea casi medio grado en seis meses. Lo que hasta ahora requería entre dos y tres décadas: lo nunca visto.
La peor de todas las noticias es que hemos alcanzado virtualmente los +2C. En rigor, estamos a más de +1,95 ºC. Pues para convertir el dato mensual a la referencia de 1880, que es el año en que la NASA comenzó a registrar la temperatura mundial, hay que añadir +0,6ºC. Y algo más, que nadie sabe exactamente muy bien cuánto, para referirnos a la era preindustrial (entendida previa a 1750, al iniciarse las emisiones fósiles fuertes en UK). A todos los efectos, hemos superado técnicamente los temidos +2 ºC. Si es por primera vez, o es para siempre, está todavía por ver.
Si todo esto a alguien le sugiere que lo que se vivió en Paris hace solo unas semanas fue una auténtica farsa y un magnífico paripé es que se acaba de dar cuenta de cuán mal equipados estamos para lidiar con la que se nos viene encima. Vendrá bien también para darse cuenta de cómo uno es abducido por los medios de comunicación al uso si se ha quedado con la imagen general que de la conferencia de París se ha hecho llegar al público: ha habido acuerdo. Todo bajo control. Mientras tanto, procuren apagar las luces que no usen, así ayudarán a salvar el planeta. Pero no dejen de crecer, ahora pintando en verde. Y, al cabo de dos meses de nada, +2ºC.
¿Pero en qué mundo vivimos?
¿Y subiendo?
¿Podría la temperatura disminuir en el futuro, siquiera levemente, o como mínimo cesar de aumentar? Si, esto podría ocurrir a partir de 2017, o incuso a finales de 2016, al cesar el fenómeno de la corriente oceánica del Pacífico Sur El Niño. También podría disminuir el mes que viene. Puede ser, pero nadie lo sabe.
Niños de la intensidad de éste no hay muchos, y se asegura que el cambio climático los potencia. En el Niño fuerte anterior la temperatura no había alcanzado, ni de lejos, niveles como los actuales. De hecho, en febrero de 1998, el máximo anterior con un Niño de intensidad similar, la temperatura fue 0,846 C inferior. Desde luego, el efecto invernadero aumentado se hace sentir. Pero en marzo de 1998 había disminuido más de 0,3ºC respecto al pico del mes anterior, y esto podría volver a ocurrir.
O no. Porque si la Tierra ya emite por su cuenta, si el Ártico está ya tan recalentado que las emisiones de metano están fuera de toda medida, si la situación actual es tal que ya hemos superado los tipping points más peligrosos, entonces…
Entonces estar en este punto es realmente desconcertante, y profundamente perturbador. El sistema climático podría estar muy bien ya en overdrive, runaway, abrupt climate change. Nadie puede asegurar que no es así, y la evidencia que vamos teniendo hasta ahora va mucho más en esta dirección que en la de la moderación. Allá quien quiera moderarse para mantener la estética.
Al mismo tiempo, por lo menos a día de hoy, es también arriesgado proclamar con seguridad suficiente que el ritmo actual de calentamiento vaya a proseguir, pues reaccionar a los datos mes a mes, incluso año a año, siempre constituye una cierta osadía.
O tal vez sea el vértigo interior lo que me hace detenerme aquí.
Es impresionante…! Por qué estamos esperando al golpe final, a la estocada, para reaccionar??
Me gustaMe gusta
Procuraré ser más documental a lo largo del día de mañana
Me gustaMe gusta
La pregunta es: ¿contempla lo del MIT las emisiones de la Pachamama, o sólo es una aproximación de lo emitido por nosotros?
Me gustaMe gusta
Gracias por tu labor, Ferran.
Me gustaMe gusta
A juzgar por las fechas y plazos que das, Ferrán, lo del aumento de casi medio grado en seis meses no me queda claro. ¿Podrías detallármelo un poco más? Gracias anticipadas.
Me gustaMe gusta
En este enlace, al final, lo verás: http://data.giss.nasa.gov/gistemp/tabledata_v3/GLB.Ts+dSST.txt
Saludos a todos y gracias por vuestros comentarios
Me gustaMe gusta
¡Muy preocupante! El aumento global y regional de temperaturas, es el resultado de la acumulación en la atmósfera de los gases de efecto invernadero ya generados por la industrialización durante muchas décadas. Lo más razonable sería concentrar esfuerzos en adaptarse a esos cambios y reducir la vulnerabilidad.
Me gustaMe gusta
Toca lo mismo que tocaba, siempre antes: aprender a vivir en un mundo siempre nuevo. Ahí es nada, cuando la novedad es el caos.
Me gustaMe gusta
Me interesa saber la verdad sobre el cambio climático.
Para conocer la verdad lo primero que tengo que hacer es mirar con calma todos los argumentos:
-los argumentos de los que dicen que el clima cambia muy rápido y que además es por nuestra culpa
-los argumentos de los que dicen que el clima cambia pero muy lentamente y además por causas naturales
-e incluso los argumentos de los que dicen que el clima nunca cambia (salvo que caiga algún meteorito gigante o algún otro evento cataclismico por el estilo) porque en realidad el clima solo fluctua sobre el mismo punto de equilibro en el que está desde hace cientos de millones de años.
Quiero dar las gracias al autor de este blog. Gracias a él puedo leer en español los argumentos de los que dicen que estamos provocando el apocalipsis y que hay que tomar medidas ya mismo porque el desastre avanza a toda pastilla.
Saludos a todos
Me gustaMe gusta
Hola de nuevo
He estado leyendo sobre agnotología, lo cual me ha hecho ponerme a pensar, y ahora mismo me estoy preguntando: ¿cómo sé que lo que yo creo que es verdad realmente lo es?
¿Alguien puede aclararme eso? ¿Alguien puede recomendarme algún libro o algo que me permite aclararme sobre esta cuestión básica?
Me gustaMe gusta
Excelente improvisado post Ferrán ! vale para la preocupante observación.
Yo también creo que en el ciclo de carbono el balance final se está desplazando a una emisión neta de CO2 por parte de la tierra.
A saber que se ha demostrado a nivel interestelar que la composición atmosférica de un planeta/satélite está estrechamente relacionada con la composición de su suelo (p ej, metales reductores en marte, compuestos orgánicos en Titán), entonces puede que la actividad de nosotros como hiperdepredadores hayamos degradado el suelo de tal forma (matarlo literalmente) que ya no pueda absorber todo el CO2 que también emitimos, y que también la capacidad de los océanos de absorber CO2 se vea rebasada entonces estamos presenciando un mecanismo desencadenado por nosotros que es varias órdenes de magnitud más influyente en la composición atmosférica.
Considerando el tiempo en que hemos logrado esta «hazaña» entonces podemos hablar de un forzamiento inusitado (yo le llamo momentum climático, una especie de inercia) que nos aproximan a innombrables fenómenos que quizás hayan sido raros en la historia natural de la tierra pero devastadores. (ej. Máximo Térmico P-E o el Síndrome de Venus) en nuestra propia era.
Saludos.
Me gustaMe gusta
En espera de que responda alguien, me respondo yo mismo.
Me he comprado el libro Ensayo sobre el entendimiento humano de Locke.
Me toca ponerme a leer.
Me gustaMe gusta
Es una excelente pregunta, ¿cómo sé que lo que yo creo que es verdad realmente lo es?.
Yo creo que todas las personas tenemos un «saber» que tenemos que cultivar, esto a la postre nos permite sospechar de información falsa o intuir algún patrón con mejores probabilidades de acertar, o en su caso, de no acertar obtener el mejor aprendizaje posible.
Por eso es difícil recomendarte algo, yo como químico (que por lo tanto este tema se me facilita) te podría recomendar preguntar los efectos que producen los gases de invernadero a un catedrático familiarizado y de renombre, y de ser posible que te invite a una prueba de laboratorio donde puedas realizar una gráfica de aumento de temperatura versus concentración. Es sencillo y vale la pena.
Después vendrá la literatura al respecto, hay que ser cuidadosos con ella claro está, pero con las bases físicas profundamente allanadas en el subconsciente el camino se facilita mucho más.
Saludos.
Me gustaMe gusta