
Evolución anual de la temperatura media de la Tierra según los datos de la NASA y el National Climatic Data Center (NOAA). La línea roja es la media móvil de los últimos cinco años
Algunos agnotólogos no sólo se refieren a 1998 como el año cuya temperatura media constituyó un récord de temperatura, lo que es incierto, sino que su desfachatez alcanza en ocasiones a tomar ese año como referencia para decir que, desde entonces, la temperatura está disminuyendo, y que nos dirigimos a una edad de hielo. En este blog hemos precavido frente a estas dos maniobras aquí, pero recordémoslo brevemente.
Sólo se puede considerar que 1998 fue el año más cálido si el análisis se efectúa a partir de los datos del observatorio británico Hadley Centre. En cambio, tanto los datos estadounidenses de la NASA, como los de la NOAA, como los de satélites, señalan al 2005 como el año más cálido. Esto es debido a que, al no existir mediciones directas en las zonas de mayor latitud cercanas al polo norte, el Hadley Centre simplemente ignora esas ubicaciones, mientras que la NASA y el NOAA los tienen en cuenta, pero suponiendo que son iguales a los de las estaciones situadas más al norte, en la costa canadiense, eurásica y Groenlandia. Lo cierto es que los datos estadounidenses siguen siendo, previsiblemente, una estimación conservadora pues, debido a la amplificación polar (mayor aumento cuanto más al norte), estamos autorizados a suponer que la temperatura media real sea algo superior.
Lo de tomar las referencias a conveniencia del resultado que se desea obtener es, por otra parte, clásico de las personas sometidas a dogma, sea éste económico, religioso o meramente psicológico. Pero cuidado: la referencia estándar de temperatura media de la Tierra es siempre el promedio preindustrial (15,0 ºC). Cuando no sea así debe indicarse expresamente, y convendría decir cómo serían las cosas con esa referencia, salvo cuando sea obvio para el tipo de audiencia al que va dirigido el texto.
Pues bien. Dado que tres de los cuatro meses del primer cuatrimestre de 2010 han sido los más cálidos de la historia en su mensualidad respectiva, y uno el segundo y, además, su promedio si ha sido el más cálido de la historia, es posible que 2010 constituya un nuevo récord. Sólo el reciente cese de las condiciones de la corriente oceánica del Pacífico Sur denominada El Niño podría alterar esta tendencia, o el efecto pantalla temporal del volcán islandés o, por supuesto, una nueva erupción volcánica explosiva.
Sin embargo, estaremos de acuerdo en que los datos de un año o de otro tienen un interés más mediático que real pues, además de la fluctuación natural (ruido), se van produciendo fenómenos que alteran temporalmente la tendencia de fondo. Estos fenómenos son la corriente oceánica El Niño, que dura cerca de un año y se produce de forma irregular cada 5-10 años (promueve un calentamiento adicional), el volcanismo (promueve un enfriamiento temporal, de un máximo de dos años) y los ciclos solares (oscilatorio cada 11 años), ahora comenzándose a recuperar después del mínimo (!).
De modo que, si en lugar de mirar la temperatura año a año, hacemos lo que se denomina una media móvil, es decir, hacemos promedios de varios años atrás y cada año añadimos el dato del año en curso y quitamos el del último, conseguiremos un efecto de atenuación considerable de los efectos pasajeros, mientras que nos quedará bien visible la tendencia de fondo.
En todo caso, la NASA acaba de hacer público dos gráficos muy significativos al tiempo que da a conocer un trabajo de 37 páginas, todavía no publicado formalmente, en el que se efectúa el mayor refinamiento de las mediciones de temperatura hasta ahora realizado (y lo pone a disposición púbica como, por otra parte, lleva haciendo su responsable, James Hansen, desde hace años). Reproduzco aquí los dos:
El de la izquierda emplea los datos del Hadley Centre, y el de la derecha los de la NOAA. Nótese que no usa los de la NASA, para que nadie pueda decirle que son los suyos. En rojo tenemos media móvil de 60 meses atrás, que neutraliza los efectos del volcanismo y de El Niño; en azul, de 132 meses atrás, o sea 11 años, que neutraliza la variación de la intensidad solar. En todos los gráficos la referencia es el promedio de 1951-1980.
¿A que no queda lugar a dudas?
Roy Spencer, el fabricador de creaciones
Hay un curioso personaje, negacionista impertérrito desde siempre, que pertenece de forma vitalicia a la Universidad de Alabama, y que responde al nombre de Roy Spencer. Aparte de estar contra la teoría de la evolución de Darwin y decir, en salto mortal intelectual de gran altura, que esta teoría se basa en la fe y que lo bueno es lo suyo (el creacionismo bíblico, que ahora etiquetan como diseño inteligente, sin duda tras paso por expertos en retórica), Spencer fue de los que estuvo mareando la perdiz durante años diciendo, junto a un colega equivalente, de nombre John Christy, que las mediciones por satélite estaban mal y que, en realidad, el planeta se está enfriando.
Al final se aclaró el asunto: resulta que fue él, Mr. Spencer, quien estaba equivocado y, curiosamente, siempre en la misma dirección: la contraria. Esto llevó a un celebrado post en Real Climate bajo el título de ‘Cómo cocinar un gráfico en tres fáciles lecciones’. Pero él sigue ahí con su blog, en sus trece, impertérrito, muchos años después.
Pues este Spencer va emitiendo sus propios datos, unas veces más correctos, otros menos, pero la amplificación mediática facilitada por la Christian Right estadounidense consigue que sus razonamientos inversos, bien presentados con apariencia de directos, tengan amplio eco en el movimiento agnotológico, con ciertas ramificaciones en la bloguería celtibérica.
Algunos juegan a las apuestas; otros efectúan mediciones y cálculos rigurosamente contrastados. No queremos ser alarmistas pero, si, estamos alarmados. Esta verdad es demasiado poderosa como para ignorarla.
Referencias
J. Hansen, R. Ruedy, M. Sato, and K. Lo – Global Surface Temperature Change – Previsto para proponer a Reviews of Geophysics – Junio 2010 – NASA Goddard Institute for Space Studies, New York – Disponible en http://data.giss.nasa.gov/gistemp/paper/gistemp2010_draft0601.pdf
“Figure 21 gives the lie to the frequent assertion that «global warming stopped in 1998». Of course it is possible to find almost any trend for a limited period via judicious choice of start and end dates of a data set that has high temporal resolution, but that is not a meaningful exercise. Even a more moderate assessment, «the trend in global surface temperature has been nearly flat since the late 1990s despite continuing increases in the forcing due to the sum of the well-mixed greenhouse gases» [Solomon et al., 2009], is not supported by our data. On the contrary, we conclude that there has been no reduction in the global warming trend of 0.15-0.20°C/decade that began in the late 1970s.”
Roy Spencer – Faith-Based Evolution – TCS Daily – http://www.uncommondescent.com/intelligent-design/roy-spencer-on-intelligent-design/
«An Audi and a Ford each have four wheels, a transmission, an engine, a gas tank, fuel injection systems … but no one would claim that they both naturally evolved from a common ancestor.»
Ray Pierrehumbert – How to cook a graph in three easy lessons – Real Climate, 21/05/2008 – http://www.realclimate.org/index.php/archives/2008/05/how-to-cook-a-graph-in-three-easy-lessons/langswitch_lang/in/
«Spencer and Christy sat by for most of a decade allowing — indeed encouraging — the use of their data set as an icon for global warming skeptics. They committed serial errors in the data analysis, but insisted they were right and models and thermometers were wrong. They did little or nothing to root out possible sources of errors, and left it to others to clean up the mess, as has now been done.»
Donde dices: «en azul de 132 años atrás» creo que quieres decir «en azul de 132 MESES atrás», como correctamente dices en el caso de la media móvil de 60 meses.
Un saludo.
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Cierto. Lo corrijo. Gracias, js.
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‘If the people leads, the leaders will follow’
Eso está mal escrito. «People» es plural, por lo tanto el verbo tiene que ir en plural: lead.
Está bien dárselas de políglota, pero hay que hablar el idioma de verdad.
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